1
Estornudo tras estornudo, aprendo que las sonrisas ni se crean ni se destruyen, sólo se transforman de positivo a negativo o viceversa. Aunque también hay algunas personas que se pasan toda la vida en nulo, sin mostrar un ápice de vitalidad, andando por caminar y comiendo por cagar. No es que odie a esa gente, más bien no comprendo por qué su mente tiene el interruptor en off o por qué simplemente no tienen uno.
Pero más importante es que una diga que se pasó toda la vida en positivo o en negativo sin saber siquiera el significado de estas.
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No quiero ir al cielo si allí está lleno de gente buena, prefiero la nada y disfrutar del silencio, leyendo mis pensamientos y susurrándole a la oscuridad que la odio tanto como a mi mismo.
Y más tarde divagar por mi mente para así crear un universo lleno de laberintos que me mantengan ocupado toda la eternidad.
Aunque a alguien le sorprenda, todos queremos ir allí donde yo digo, ya que en la vida luchamos y luchamos para ganarnos a pulso esta utopía real.
