Tu música

Volví a hacer de la música mi amante, era ella la que me quería ver desnudo, recorrer cada rincón de mi piel buscando algún lugar por erizar, haciendo de mi voz una arritmia. No pude contenerme y mientras ella me quitaba los pantalones empezé a seguir su ritmo, no era ràpido ni lento tan solo era su ritmo. Ella me besaba debajo de mi ombligo y utilizaba mis pelos simulando un bajo, mientras yo le cogía su cabello y enrredaba mis deseos. Ella dibujó pentagramas en mis piernas, y erizó mis pelos con su aliento simulando las notas de su pasión. Poco a poco lenvantó mi camisa empezando a lamer mis pezones con sus acordes, para poder acabar besando mis labios con aquel solo que tan bien se le daba. Esa noche interpretamos toda su obra y al acabar ella se fue, no me dejó ni su single, tan solo ese recuerdo tan dulce que sólo representamos una vez.

"Sólo follaron mis palabras

 pero el orgasm0 lo tuve igual."

                                 B.W

Adéu....

i gràcies!

Tu mal humor

Hace ya 10 años que desapareciste de mi vida, ni siquiera recuerdo bien tu cara, y no nos pudiste dejar nada material para recordarte, aunque ahora todas las mañanas recuerdo tus gritos porqué no llegaba a clase. Por desgracia o fortuna ahora soy yo quien  se enfada con el adolescente este y cada vez tengo más fruncido el ceño, por eso, gracias por dejarme la mejor herencia, con la que puedo recordarte todos los días de mí vida.

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Microrrelat per al 1r concurs de microrrelats "La herencia intangible de nuestros mayores"

 

Justina

¿No es justo verdad? Yo nací en un país donde mi peor día es cuando el internet no me funciona, pero para ellos es cuando son apaleados por sus “protectores” o tan solo se comieron un poco de pan. Por otra parte, tampoco es justo que a mí se me tache de mala persona cuando no me preocupo por ellos todos los días, pero sí que es justo que te odien si lo único que haces para luchar contra la injusticia es leer este micro relato.

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 Microrrelat per al concurs de microrrelats "Letras como espadas"

Voy

De buena mañana, cuando el Sol salía a saludar, yo aún estaba en la esquina del bar. Claramente ya hacía horas que había cerrado, yo estaba en el suelo dormido y con la baba colgando. Era día festivo y pasó mucha gente por mi lado, supongo que unos se reirían y otros evitarían mirarme, todos me conocían claro está. Ya hacía un año que murió pero seguía soñando con ella y la mejor forma de encontrarla era emborracharme hasta dormirme, tal vez no hacía bien, pero ¿Quien hacía mejor, aquel que trabajaba 12 horas para sacar adelante su familia o yo, que simplemente quería reunirme con ella?

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 Microrrelat per al Concurs de Micro/Contes TALENTOCOMUNICACION

Ella

Aprendí a ser un turista en mi propia vida, no de esos que van a ver los mejores museos o las calles más bonitas, sinó de los que aprenden de la experiencia y conocen gente perfecta, ese es el adjetivo, perfecta. La verdad es que sólo sería imposible conseguirlo por eso busque y busque, hasta encontrar a esa persona que odiándome todos los días saca un momento para apreciarme. Con ella cada día aprendo a conocerme y ella se me muestra desnuda, sin ningún tipo de complejo o reparo, mostrando que soy yo el que sabe cada momento de su presente vida. Por eso soy un turista, un turista en mi vida, con mi guía roja y su manía adorable de mostrarme los detalles más minusculos de su vida, desglosando ante mi la belleza de sus pensamientos y pidiendo a gritos ser escuchada, tal vez no para que la comprenda pero si para mostrar sus respetos hacía mi.

"Hoy, 

mañana 

y siempre

 será sublime

 y lo sabes."